Tradiciones y modernidad, en un viaje único
Fascinante, histórica y moldeada por la influencia de milenarias culturas, así es viajar a Turquía, un bello país situado entre Oriente y Occidente que ofrece al viajero más experiencias de las que pueda imaginar.
Os invitamos a viajar a Turquía e iniciar un sorprendente periplo por sus principales ciudades y lugares de interés turístico, donde podrás comprobar cómo las tradiciones más arraigadas confluyen con perfiles urbanos modernos, bellos paisajes de contrastes y una gastronomía deliciosa que aúna en la misma mesa lo mejor de Europa y Asia.
Estambul, Ankara, Capadocia, Pamukkale, Éfeso, Troya, son sólo algunas de las paradas que nos esperan en este recorrido por la historia.
Sus bellos paisajes conviven con la animada actividad de sus ciudades.
Prepárate para iniciar un viaje inolvidable por la atractiva Turquía, un país único con el poder de transformar al viajero en el que descubrirás una sorprendente riqueza cultural y gastronómica.
En nuestra hoja de ruta se abre paso la cosmopolita Estambul; la animada capital de Ankara; los bellos paisajes de Capadocia; el misticismo de la ciudad santa de Konya; la sorprendente Pamukkale con sus increíbles paisajes de cal que parecen hechos de algodón.
Turquía ofrece al viajero paisajes de contrastes y muchas experiencias que compartir junto a su acogedor pueblo. Prepárate para viajar a un pasado donde confluyen realidad y leyenda; tradición y modernidad.
Las ruinas de Éfeso, los monumentos de Pérgamo o la antigua ciudad de Troya son algunas de nuestras excursiones imprescindibles que harán único tu viaje.
Aún te queda mucho más por descubrir en Bursa, donde visitaremos la Mezquita Grande de Ulucamii, el Bazar de Seda Kozahan, el Mausoleo Verde y Topçular. Desde allí, cruzaremos el Golfo de Izmit en ferry para alcanzar Eskihisar.
Crucero por el Bósforo.
Durante la excursión marítima podrás contemplar algunas de las joyas del patrimonio turco Una de las experiencias que te recomendamos realizar durante tu estancia en la ciudad de Estambul es la de recorrer el estrecho del Bósforo a bordo de un animado crucero.
Durante la travesía podrás descubrir el sorprendente paisaje urbano de Estambul y disfrutar de un viaje inolvidable entre dos mundos: al este, Asia; al oeste, Europa.
Prepara la cámara de fotos, durante el trayecto podrás contemplar hermosos palacios, como Bylerbeyi, Ciragan y Dolmabahçe e históricas fortalezas, como la de Rumeli Hisar; e increíbles puentes que separan el Mar Negro del Mar de Mármara.
Gran Bazar de Estambul.
Encuentra el mejor recuerdo entre sus más de 3.000 tiendas.
Sin duda, uno de los principales atractivos de esta ciudad es su Gran Bazar, una pequeña y bulliciosa ciudad dentro de esta gigantesca urbe compuesta por más de 3.000 tiendas.
Sus orígenes se remontan a la época de Mehmed II, cuando en 1455 construyó cerca de su palacio el antiguo bazar (Eski Bedesten). El recinto, que cuenta con 22 puertas, ofrece al visitante todo un mundo de olores, colores y sabores en el que encontrarás la excusa perfecta para recordar un viaje inolvidable.
A pesar de su gran entramado, este bullicioso y animado bazar es fácilmente manejable, debido a que el nombre de las calles indica el tipo de artículos que podrás encontrar en las tiendas. Aquí encontrarás todo lo que buscas, razón por la que este bazar es uno de los principales reclamos de la ciudad.
La Capadocia.
Situado al suroeste de Turquía, en el valle del río Menderes, en la provincia de Denizli descubriréis un rincón lleno de sorpresas, a subir una ladera descalzo mientras disfrutas de privilegiadas vistas.
Y es que todo puede pasar en la carismática Pamukkale, una zona natural situado al suroeste de Turquía, concretamente en el valle del río Menderes, declarada por su belleza Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Sus aguas termales y cataratas blancas fosilizadas son sólo algunos de sus atractivos y dan forma a un paisaje único sólo comparables a otras maravillas como las fuentes termales de Mammoth (EE.UU.) o Huanglong (China).
Con estas credenciales, no es de extrañar que cada año miles de personas se acerquen hasta Pamukkale para contemplar con sus propios ojos uno de los parajes naturales más impresionantes del planeta.
Éfeso.
Conoce una de las joyas arqueológicas de Turquía
Éfeso es siempre una de las paradas indispensables de los que quieren conocer los encantos de Turquía. Entre sus atractivos encontrarás una de las joyas arqueológicas del país:
Las famosas “Ruinas de Éfeso”, en las que podrás apreciar la herencia griega y romana de la ciudad. Éfeso fue un puerto clave del Mediterráneo Oriental y formo parte las doce ciudades de la Dodecápolis jónica, enriquecida por su activo puerto comercial.
Un pasado del que hoy dan fe una inmensa ágora de comercio que puede verse en las ruinas. Pero también Éfeso fue un foco cultural, político y religioso.
De hecho fue visitado por Estrabón, Cicerón, Julio César, Cleopatra y Marco Antonio, los emperadores Trajano y Adriano, San Pablo y San Juan, cuya tumba se encuentra en las ruinas de la basílica, junto a la ciudadela bizantina que domina la vecina ciudad de Selçuk.
Si visitáis las famosas Ruinas de Éfeso, no podéis perderos:
- El anfiteatro
- La Avenida de Mármol
- La Biblioteca de Celsio
- La Puerta de Mihidrates y Mazues
- El Ágora del Comercio
- El Templo de Adriano
- La Fuente de Trajano
- El Templo de Domiciano
Troya
Después de un siglo de investigaciones histórico arqueológicas, se ha podido establecer que Troya fue destruida y reconstruida por lo menos nueve veces, tanto antes como después del periodo en el que se suponen se desarrollaron los hechos cantados en los versos homéricos.
Durante muchos siglos, la existencia de la ciudad de Troya se limitaba a las leyendas de la Antigüedad y a textos de personajes universales como Homero. Hoy los yacimientos arqueológicos de Troya, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentran entre los más visitados en todo el mundo.
La antigua ciudad, está compuesta por nueve yacimientos arqueológicos superpuestos unos encima de otro, son los nueve momentos de gloria de la ciudad cuya historia se extiende a lo largo de varios milenios, hasta que fue definitivamente abandonada.
Los restos más antiguos corresponden al 3.000 a.C. y los últimos rondan el año de nacimiento de Jesucristo. En sus yacimientos se pueden ver las Murallas de la Ciudad, el Templo, el Teatro y los cimientos de muchas casas.